La resistencia puede considerarse como la capacidad que nos permite soportar la actividad diaria. Naturalmente esta no será igual para todos los sujetos, sedentarios o jugadores/as profesionales, practicantes ocasionales en tiempo de ocio o niños/as en formación. Tampoco será similar para cada una de las especialidades deportivas o la actividad física que se practica; no es la misma resistencia la que necesita un ciclista en ruta o un maratoniano, que la de un jugador de baloncesto, judoka, etc., y aunque estamos hablando de resistencia, en este caso se trataría de una resistencia específica.
Vamos a ofrecer unas definiciones de varios autores para analizarlas y conocer mas sobre esta capacidad:
Mora, J.:
La aptitud, capacidad, disposición o facilidad de acción para mantener durante un tiempo prolongado, el máximo posible, un esfuerzo activo muscular voluntariamente.
Lizaur y col.:
Capacidad de mantener la continuidad de un esfuerzo retardando lo más posible la aparición de la fatiga.
Grosser y col.:
Capacidad de resistencia contra el cansancio al efectuar un esfuerzo duradero y la capacidad de recuperación rápida.
Weineck, J:
Capacidad psicofísica del deportista para resistir la fatiga.
Manno, R.:
Capacidad de resistir la fatiga en trabajos de prolongada duración y que se caracteriza por la máxima economía de las funciones.
Fuente de la información y agradecimientos: Juan J. García Pellicer